Anarchivo.

“El archivo de los comunes es un anarchivo (M. Matienzo): sin archiveros, sin comisarios, sin usuarios. No hay categorías de referencia, no hay gestores privilegiados del sentido, ni tampoco actores externos o distantes. El anarchivo discute las tradicionales funciones normalizadoras, objetivistas e institucionales del archivo. El anarchivo abraza la crítica postcolonial y postmoderna: desautoriza a los legitimadores de las nociones de sentido común, cultura de élite, buen gusto, superioridad moral o discurso objetivo. El anarchivo sólo puede ser un prototipo y por tanto es extitucional, mundano y provisional (N. Southern).”

El Archivo IDYS se presenta como una nueva línea de trabajo dirigida a la investigación de prácticas colaborativas y entornos de aprendizaje no formal dentro de los objetivos pedagógicos del Instituto Do It Yourself. Este programa, se articula a partir de investigaciones sobre prácticas colectivas, procesos participativos, prácticas culturales y/o activistas, procesos pedagógicos, experiencias de aprendizaje no formal,… se concreta a través de diferentes formatos (archivo físico y virtual, producciones específicas, presentaciones…) y está en conexión con múltiples procesos ciudadanos en marcha. Contribuyendo a crear un banco común de conocimientos que dote a la ciudadanía activa de herramientas prácticas y que permitan realizar reflexiones críticas que a su vez inciten a llevar a cabo acciones propositivas.

El Archivo IDYS pretende ser un archivo de la acción colectiva y por tanto “político”. Basado como está en la colaboración, necesariamente hemos de reconocer cuándo esta se produce y cuándo no. El primer paso para que se dé, es la coincidencia en unos intereses comunes que buscan incidir “políticamente” en un conflicto social. Así, uno de los elementos principales del archivo es justo su conexión con procesos ciudadanos y movimientos sociales. Agencias de significación colectiva definidas por la capacidad de sus miembros para construir una identidad común y para la detección de conflictos sociales que justifican una acción colectiva, que desborda los límites en los que actúa. Buscando cambios en el sistema de reglas y relaciones sociales, como en su momento estableció el sociólogo Alberto Melucci.

La “política” del Instituto Do It Yourself, tal como ya enuncia su nombre, parte del DIY («hazlo tú mismo») consistente en formas de producción autogestionada (cuya procedencia localizamos en el punk y otras corrientes de pensamiento contracultural posteriores como el movimiento hacker, que han utilizado este recurso para llevar a cabo sus propias auto-representaciones y producciones fuera de sistemas tradicionales de mercantilización e institucionalización), pero que se dirige hacia formas colaborativas más amplias en las que se implican grupos diversos, lo que se ha venido a denominar como el “Do It Together”. El DIY-DIT propone que auto-organicemos nuestras propias estructuras de trabajo, distribución y comunicación. En este punto, se hace necesario señalar que al mismo tiempo se diferencia de aquellas interpretaciones del movimiento “maker” en clave de emprendizaje y de impronta neoliberal, desligadas de los valores heredados de la ética hacker y sus reivindicaciones, cuando desliza su foco desde la organización colectiva hacia la mera producción técnica.

El Archivo IDYS se constituye no sólo como un registro de memoria colectiva de los grupos subalternos y sus conflictos generando un patrimonio de experiencia e identidad colectiva, sino que se piensa como “caja de herramientas”, un instrumento capaz no solo de archivar memoria sino también de producir experiencia. Frente al repositorio pasivo, se plantea un archivo que se nutra de experiencias y que genere sus contenidos en función de los intereses de la comunidad que lo soporta. Para su funcionamiento, se nos presenta como fundamental la generación de acciones en su entorno, que vengan a darle sentido y contenidos, provocando la interacción entre diferentes grupos a través de actividades que se constituyen como espacios para la visibilización de los proyectos, la dialéctica y el debate.

A partir de estas premisas generales podemos subrayar una serie de líneas principales de investigación y trabajo del Archivo IDYS que se relacionan con el contexto y los intereses del IDYS.

En primer lugar, lo que podríamos denominar – Infraestructuras de Gestión Ciudadana –. Ya en 1968, Henry Lefebvre se refería al ‘derecho a la ciudad’ como un derecho fundamental del ser humano frente a la urbanización destructiva del modelo capitalista de producción, que requiere ‘crear el urbanismo’ de una forma colectiva y común, que permita a los ciudadanos apoderarse de sus espacios y sus vidas urbanas para recuperar la facultad de participar en la vida de la ciudad. Existen multitud de espacios públicos recuperados (solares, huertos ciudadanos, centros sociales…) donde la ciudadanía activa plantea infraestructuras dúctiles para su apropiación y reactivación mediante dispositivos autoconstruidos en procesos colaborativos.   

Otro campo de interés son las – Experiencias de Aprendizaje No Formal –, educación alternativa, escuelas populares, y escuelas libres en relación con pedagogías activas. El interés que desde el Archivo IDYS despierta la educación no formal, se debe tanto a su voluntad para experimentar con nuevas formas de organización social, como a la capacidad para la creación de programas educativos centrados en valores dirigidos a la búsqueda de la transformación social, atendiendo a las necesidades y conflictos existentes en la sociedad actual.

Otra línea a explorar son las – Prácticas Artísticas Colaborativas –, entendidas como herramientas posibles para la transformación social cuando se implican en procesos de reivindicación o activación social/política/cultural en conexión o complicidad con comunidades. En palabras de Luis Navarro: “el arte como actividad indispensable en la vida de los pueblos y los individuos, en tanto que se trata de una praxis que fusiona la imaginación con la actividad humana más allá del trabajo productivo y reproductivo […] una herramienta fundamental para mejorar la conciencia de las personas y hacerlo permeable a la sensibilidad necesaria para la construcción de una nueva sociedad”.

Ya hemos señalado anteriormente que los movimientos sociales trazan un diagnóstico de los conflictos más acuciantes en la sociedad en la que vivimos y son los que organizan la resistencia necesaria ante la pérdida continua de derechos laborales y sociales, siendo la movilización colectiva y la acción directa sus principales armas. Esta línea de investigación se enfocará sobre  – Activismo, Sindicalismo y Movimientos de Base –.

Entendemos estas líneas de investigación como ámbitos permeables, no estancos, ya que como vemos en su propia definición son ámbitos de actuación que permiten la transversalidad y dónde está se da de forma natural por la retroalimentación entre unas y otras prácticas. Estas categorías quedan abiertas a su transformación por la propia comunidad que construye el archivo, ya que en un momento de generalización de las prácticas de archivo, el Archivo IDYS, busca el desarrollo de un modelo que ponga en crisis su propia condición, para resistir al proceso de cooptación por parte de la mediación política y cultural, tendiendo más allá de las activaciones necesarias para ponerlo en marcha, a la formación de un Anarchivo tejido por afinidades que den lugar a una comunidad que lo construya, le de sentido y valor de uso con voluntad inclusiva y desjerarquizada.

 

Pablo España / Todo por la Praxis / Instituto do it Yourself